Maria-Mercè Marçal

(Nou diccionari 62 de la literatura catalana)

Ivars D'Urgell, 1952-Barcelona, 1998. Poeta, novelista, traductora y ensayista



Estudia el bachillerato en Lleida y Filología Clásica en la Universidad de Barcelona, donde pronto conoce a otros jóvenes poetas (Ramon Pinyol, Xavier Bru de Sala y, más tarde, Miquel Desclot, Jaume Medina...), con quien en 1973 funda Llibres del Mall. Se casa con Ramon Pinyol, y viven juntos cuatro años. En 1976 gana el Premio Carles Riba de poesía con Cau de llunes [Nido de lunas] (1977) y se perfila como una de las voces más innovadoras de la generación de los setenta, dentro de la línea de Brossa y el Foix más surrealista. Al mismo tiempo su lucha política en las postrimerías del franquismo se concreta en la militancia en el PSAN y en la participación en la Asamblea de Cataluña. Enseña lengua y literatura catalanas, profesión que ya no abandona. Inicia también su actividad como conferenciante y ensayista sobre el feminismo y la literatura, que la convertirán en una de sus teóricas más sólidas. En 1979 crea la sección de Feminismo de la Universitat Catalana d'Estiu de Prada que coordina hasta 1985 y colabora en múltiples proyectos, exposiciones, revistas de signo independentista, feminista y lésbico. Algunos de sus poemas son musicados por cantantes de la Nova Cançó. En 1979 publica Bruixa de dol [Bruja de duelo], su segundo poemario, que la convierte en una poetisa de éxito. En 1980 colabora en la fundación de Nacionalistes d'Esquerra, pero paulatinamente se decanta por una militancia netamente cultural, y en la tarea de la recuperación lingüística. El mismo año nace su hija Heura, y afronta la maternidad en solitario. Vive una experiencia crucial que elabora poéticamente en Sal oberta [Sal abierta] (1982) -un libro dominado por el soneto y empapado de la tradición popular, donde el espectro imaginista se extiende a la sal, el mar y la hiedra- y en la segunda parte de La germana, l'estrangera [La hermana, la extranjera] (1985). Este último libro recupera una breve recopilación anterior formada por quince sextinas, Terra de mai [Tierra de nunca] (1982), y trata abiertamente el amor entre mujeres, tema inédito hasta entonces en la poesía catalana. En 1989 recoge toda su obra poética en Llengua abolida (1973-1988) [Lengua abolida], que incluye Desglaç [Deshielo]. Desde 1994 consolida el col·lectiu d'escriptores del Centro Catalán del PEN Club, organiza encuentros, homenajes, mesas redondas, sobre todo a propósito de la poesía y el ensayo. También colabora con el grupo "Filosofía y género" de la Universidad de Barcelona coordinado por Fina Birulés, compañera de la poeta, y traba relación con la filósofa italiana Luisa Muraro, entre otras personas.

Su poesía tiene la impronta de una aventura apasionada y libre y, por lo tanto, arriesgada. Llevada a cabo desde la triple rebelión que inaugura la "Divisa" de Cau de llunes, libro motriz, los ejes temáticos de su obra se organizan en torno a la identidad femenina. El amor, la soledad, la incomunicación, la pasión, la maternidad, la rebelión, etc,, se convierten en subtemas. A contrapelo de lo que nuestra cultura ha definido como feminidad, en sus primeras recopilaciones la luna se convierte en imagen privilegiada de una identidad femenina ideal, trastocando la subordinación tradicional a la luz solar. La tensión entre el yo poético, la luna y la sombra -zona inexplorada, incontrolada- es el esquema triangular básico que hace crisis en Terra de mai (1982), instantánea consecución de la utopía. En La germana, l'estrangera se inicia una introspección que rechaza o cuestiona las imágenes tradicionales del yo: la infanticida, la impostora, la culpable, la madre, la hija, el amante, la hermana, la extranjera ... Sombras reflejadas en un espejo sin fondo. Sombra, herida y sangre, sangre arrebatada convertida en fósil petrificado. Con La passió segons Renée Vivien [La pasión según Renée Vivien](1994), novela en torno a la poetisa lésbica Pauline M. Tarn, se revela como una gran novelista, tanto por la creación de la prosa, la estructura audaz, como por la formulación de un universo que hay que situar en la línea de Virginia Woolf y Djuna Barnes. Marçal tradujo obras de Colette, Yourcenar, Leonor Fini y, en colaboración con Mònika Zgustová, las poetisas rusas Anna Ajmátova y Marina Tsvetáieva. Dentro del ensayo, destaca su estudio y antología Contraclaror [Contraluz](1985) sobre Clementina Arderiu, la antología Paisatge emergent. Treinta poetes catalanes del segle XX [Paisaje emergente. Treinta poetisas catalanas del siglo XX] (1998), con otras escritoras, y los artículos "Rosa Leveroni, en el umbral" (1986) y "Com en la nit, les flames" (1998), sobre Ajmátova y Tsvetáieva.

Quién soy y por qué escribo

Maria-Mercè Marçal

No puedo repasar al por menor los años que separan a aquella antigua chica de la mujer que intenta responder a la doble pregunta: "quién soy, por qué escribo". Esquemáticamente, algunos hitos aparecen en la nota biográfica del final de esta publicación. A primer golpe de vista, me seduce ver, en el espejo de mis versos, de mis libros, una serpiente y sus mudas de piel: mudas que hablan y al mismo tiempo permanecen en silencio. La serpiente quizás es como aquella que mi madre me decía que había en un altillo: su intención era evitar que subiera por una escalera de mano demasiado insegura. Yo subía sigilosamente, hasta que dos o tres travesaños antes de llegar arriba del todo, la veía, veía cómo se despertaba la serpiente y, espantada, echaba a correr hasta abajo de todo. Para volver una y otra vez, sin enmienda. Tentación o reto, trasgresión y carencia: la literatura. El altillo de la serpiente estaba en la casa donde fuimos a vivir al dejar la masía, las semillas del primer traslado. Quizás la primera metáfora.

  • Poesía Dibujada
  • Massa mare
  • Música de poetes
  • Premi LletrA